La esfera espiritual

¿Qué hay de la vida espiritual?

¿Existe alguna constante entre los esquizoides en referencia a este tema?

Ya que somos personas que vivimos con un marcado desarraigo de nuestros semejantes, ¿es posible que tengamos cierta concordancia entre esquizoides acerca de la esfera espiritual? ¿Buscamos algunas respuestas en esa dimensión, dado que no las encontramos entre humanos? ¿Tenemos inquietudes espirituales ante la aridez con la que se nos presentan el mundo convencional y sus habitantes? ¿Hurgamos en la idea de Dios, en la magia o en cultos exóticos?

Yo sí. Soy cristiano. Crecí en una familia católica pero luego encontré respuestas en el cristianismo reformado, protestante. Mi condición de esquizoide, no obstante, ha impedido que cumpla con una de las funciones fundamentales que todo cristiano debe cumplir: congregarse en una iglesia. Cuando era católico, eso no era un problema, podía asistir a la misa y convertirme en un punto minúsculo y anónimo en medio de la masa, sentado en la última banca del templo. Pero las iglesias evangélicas no son así. De hecho hay una apuesta muy grande por la confraternidad entre los fieles. Todo nuevo concurrente es abordado, bienvenido, saludado y se le brinda un cálido recibimiento. He pasado por eso y, como es de suponerse, me incomodaba mucho. Probé hasta en cuatro o cinco iglesias distintas pero a la larga terminé abandonando, simplemente porque me era imposible departir, compartir, intercambiar palabras, lo que fuera, con los demás. Y esto no tiene nada que ver con ellos, que, como digo, tienen las mejores intenciones. El problema es uno mismo, como esquizoide. 

Pero no he dejado mis motivaciones espirituales de lado. Soy un creyente y he experimentado eventos muy reconfortantes gracias a Dios. Eso sí, ya que congregarme me exige más de lo que puedo cumplir, me he detenido más a leer la Biblia, libros de teología, mirar videos de contenido cristiano en Internet, escuchar radios cristianas, etcétera. Pero me queda ese sinsabor de no sentirme capaz de volver a la iglesia, a los cultos. Y es importante rodearse de gente con alguna afinidad espiritual, pero vamos que es un asunto pendiente para mí.

Dicho esto, me interesa saber qué sucede con otros colegas de trastorno. ¿Sienten ustedes que la vida solitaria a la cual los confina su condición de esquizoides les ofrece oportunidades diversas para bucear en la dimensión espiritual? Y no quisiera reducirlo a esquemas necesariamente religiosos, sino a cualquier otra actividad que despierte inquietudes espirituales, llámese meditación, yoga, tai chi, ho'oponopono, reiki o simplemente el hecho de leer, investigar y preguntarse sobre temas relacionados a la filosofía, a nuestros orígenes como civilización, a la influencia de los astros, cualquier forma de pensar las diversas posibilidades que nos ofrece la esfera espiritual. Creo que la espiritualidad es un aliado importante, pues acude a nosotros para salvaguardar nuestra integridad: si nos aislamos y si además cerramos la puerta a la meditación, a la oración, a la introspección, nuestras vidas podrían ser demasiado miserables.  

Siéntanse libres de comentar, si les apetece.