De sombras y miedos
"Era realmente, como él se llamaba a veces, un lobo estepario, un ser extraño, salvaje y sombrío, muy sombrío, de otro mundo que mi mundo. Yo no supe, en verdad, hasta que leí estas sus anotaciones, en qué profundo aislamiento iba él llevando su vida a causa de su predisposición y de su sino, y cuán conscientemente reconocía él mismo este aislamiento como su propia predestinación."
(Hermann Hesse, "El lobo estepario")
Es como mi segunda Biblia.
Hablo de El lobo estepario. La primera vez que leí la historia de Harry Haller sentí una inmediata conexión con algunas de sus costumbres, características y manías, reveladas en sus anotaciones a su vez narradas por el sobrino de la tía que le alquiló un cuarto por unos cuantos meses. No sé si fui (soy) salvaje: tal vez en un sentido amplio de la palabra lo sea, tal vez alguna arista de mi existencia cruce los bordes civilizados y me deposite entre los seres silvestres. Pero sí entiendo que me pertenecen, con absoluto derecho, aquello del profundo aislamiento (el cual, además, reconozco como mi propia predestinación), aquello de ser extraño (a medida que he ido aumentando mi presencia en esta vida he terminado por rendirme y concederles a esos que me tildan de excéntrico que sí, que soy extraño, que soy totalmente diferente al molde tradicional, a la manufactura de lo que se debe ser). Y, principalmente, aquello de ser sombrío, muy sombrío. Está en mi ADN. Soy un tipo gris, apagado, melancólico, que vive apartado y que se siente más cómodo en una esquina invisible. No lo voy a negar, a estas alturas de mi vida: soy sombrío.
Pero no lo sabía en un principio.
Quiero decir: cuando no me sabía esquizoide, toda característica (mi silencio, mi tendencia a apartarme, mi indiferencia, mi tonalidad gris, etc.) la colocaba yo en un mismo bolso, el bolso de la timidez. Soy tímido, me decía. O sino: soy introvertido. No había matices. Cualquier cosa que saliera de mi interior hacia los demás y que estos me señalaran, como si de algo fuera de lo común se tratase, iba a caer en el mismo conjunto de cosas que se explicaban únicamente como timidez o introversión. Ya luego, años y diagnósticos después, me he visto en la necesidad de catalogar mis características personales de acuerdo a ciertas señas y evitando colocarlas todas en un mismo bloque. Así que aquello de ser sombrío, que años antes solo era una referencia más a mi timidez/introversión, pasó a ser más bien harina de otro costal. Sin embargo, no me atrevo a sentenciar que lo sombrío sea intrínseco o atribuible a todo esquizoide o, lo mismo es, que todo esquizoide es sombrío.
En muchas ocasiones, antes de que yo me diera cuenta de ello, otros me lo habían señalado con claridad, mediante frases ciertamente parecidas, dichas por distintas personas, y que tenían en común la palabra miedo. Al menos tres personas con las que trabajé me dijeron, cada cual en su momento, una frase que me dejó pensativo y con interrogantes no resueltas. Y es que dichas frases no eran las típicas, las que me han dicho toda la vida, del tipo: no hablas mucho, ¿no?; o te comió la lengua el ratón; o esa que dice hey, pensé que no estabas acá. Cosas así. A veces dichas con seriedad, a veces en tono de broma o de genuina curiosidad. Pero estaba/estoy acostumbrado a todo eso. Y bastante aburrido, la verdad. Como si no tuvieran ingenio suficiente para sacar de la chistera alguna cosa más sorprendente u original.
Pero no estaba familiarizado con aquellas frases que al menos estas tres personas con las que he trabajado me dijeron. No me reconocía en ellas. Veamos:
- Al comienzo, tú me dabas miedo
- Si no te conociera bien, me darías miedo, eres oscuro
- A veces me das miedo
Es evidente que la palabra en común es miedo.
Hasta entonces, jamás me imaginé que yo podría generar esa reacción o sentimiento. Más bien siempre me he considerado un tipo pacífico, tranquilo (demasiado), perfil bajo, invisible. Pero, ¿miedo? Aunque no era descabellado, después de todo. Y es que hay un elemento que subyace a ese miedo que he podido transmitir a otros sin proponérmelo. Y ese elemento es la oscuridad. Lo sombrío. Pienso que esa opacidad que proyecto es un componente esencial para la construcción de una imagen gris y amenazante: lo que a su vez ocasiona miedo.
Ahora, como es costumbre, siempre deseo saber si ciertos rasgos que tengo son propios de mi identidad, fuera de toda consideración esquizoide, o si son parte del común denominador entre todos o al menos la mayoría de esquizoides. Es por eso que me interesa toda opinión que puedan dejar en la sección de comentarios.
¿Se consideran sombríos?
¿Qué otras características de Harry Haller, el lobo estepario, creen poseer?
Todo lo que cuentas me suena mucho. Creo que lo de "dar miedo" forma parte de nuestra coraza : nos quitamos así de encima a muchísima gente. Como lo vemos como una amenaza (el 90 % o más de las veces infundada) , "atacamos" primero. Algo ha escrito sobre esto Mikel Martínez; él lo ve como una reacción "animal" y es que somos como bichillos del bosque, que espantamos y somos espantados a ratos.Es muy probable que sea así. Además, este tío es psicólogo, así que el sabrá.
ResponderEliminarEn mi caso concreto - creo que ya me conoces un poquito, je,je,je - soy encantador si quiero, pero tengo plena conciencia de estar actuando, que no soy realmente yo. Yo mismo, cualquier día, no iría conmigo a ninguna parte, ja,ja,ja, pero tengo que cargar con ello. Soy incansable en materia de negocios (capaz de "actuar" durante horas o días ...o meses o años), me suelen salir muy bien (cuando los hay... llevamos casi 10 años de sequía)y, por nuestra manera de ser, en mi vida engañé a nadie : más bien fui engañado alguna vez. Sin problemas.Cuando puedo lo devuelvo y bien devuelto; cuando no, me aguanto.
Si no hay negocios por medio, si no conozco de nada al sujeto, quizás no dé miedo-miedo, no sé, pero doy un mal rollo que te cagas. En general soy ceñudo y mal encarado y tan displicente como cualquiera de nosotros.Evalúo a la gente de un golpe de vista y creo que el 98 % carece de valor alguno. Cualquiera que es mirado así lo nota, se siente incómodo (me pasa cada vez más a menudo y créeme que lo siento... durante 20 segundos), pero ¿ qué le hago yo ?
Un punto a mi favor es que peso unos 100 kilos. La gente no suele meterse en líos conmigo,ja,ja,ja. Detrás, sin embargo, NO HAY NADA. Sólo un animalillo asustado... pero eso la gente lo ignora completamente ( afortunadamente... )
PD.- Me compro el libro de Hesse mañana mismo... a ver. Me ha picado la curiosidad. Salu2.-
Bien por ti, por haber encontrado una salida o al menos una posibilidad de manejar situaciones. En mi caso, me resulta agotador actuar; es decir, lo hago si no queda más remedio, pero las pilas se me terminan rápido. Saludos.
EliminarCuando leo un escrito de cualquier otro esquizoide (los relativamente pocos que publican o han publicado algo en internet, o ciertos autores que tuvieron este trastorno o pudieron padecerlo) me parecen inocentes, puros, incluso más bondadosos que el resto.
ResponderEliminarE imagino que si tuviera el placer de conocer a uno en persona sería exactamente lo mismo, aunque hasta donde sé somos más expresivos y cercanos en las letras que en los sonidos (escribiendo-hablando).
En mi caso, me han dicho varias veces lo que comentas, sobretodo "Cuando no te conocía me dabas miedo" y "A veces me das miedo", la de "Si no te conociera bien me darías miedo, eres oscuro" bueno, esa no me la han dicho, al menos no la primera parte.
He intentado analizar de dónde proviene esa sensación que tienen los demás de mí, y quizá yo también la puedo sentir; la distancia. Si caes desde lo alto de un edificio, puedes sentir confianza con un pájaro que vuele cerca y al que puedas agarrarte. En cambio, si hay un pájaro lejano que no se deja coger y además te observa con una sonrisa en la que parece burlarse de tu situación -como creo que puede ser mi caso-, bueno, es lógico que dé miedo. Y no olvidemos que un esquizoide puede ser el que cae y el pájaro al mismo tiempo.
Ahora que hablas de Harry Haller, me parece muy curiosa la escena en que -corrígeme si me equivoco- se queda dormido en un bar, cuando Armanda (O Hermine, dependiendo de la edición) le deja solo.
Exceptuando esta ¿Virtud? de poder sumergirse en el ambiente, creo que me siento identificado con varios de sus rasgos: estar contento por situaciones o detalles pequeños -como observar una flor-, por ejemplo.
Supongo que cada esquizoide tiene su "esquizoide de cabecera", un tipo de esquizoide con el que se siente más identificado que con el resto (supongo que depende de si es lángido, evitativo, y demás). Por ejemplo, hablaste de Syd Barrett, y aunque es esquizoide no se puede comparar con, por ejemplo, Kafka. Son completamente distintos. Diferentes estilos.
En mi caso, Harry Haller no es mi "Primer esquizoide", pero desde luego uno de los primeros.
¿Cuál es el tuyo, si es que lo hay?
Sin duda, y pese a no ser un tipo de carne y hueso sino un ser de ficción, mi esquizoide de cabecera es Harry Haller. Comparto con él muchas coincidencias, no solo en relación a su comportamiento, sino incluso a cosas menos esenciales como por ejemplo su gusto por los libros y la buena música. Incluso ambos padecemos de gota!
Eliminarhan olvidado a Marcel Meursault......otro más de inventario
EliminarTe llevo leyendo bastante tiempo y creo que podrías perfectamente escribir tus memorias, ahora (lo siento) que estas desempleado y que estas en tu palacio privado y si logras sacar algo de motivación ( que es algo puntual y esquivo entre nosotros) crear un libro, si te va bien quizá hasta te puedas retirar, seria super ventas entre psicólogos y estudiantes de psicología jajaja un saludo.
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
EliminarLa idea de un libro (incluso tengo una ficción a medio hacer) siempre ha cruzado mi mente. Pero como muchas cosas en mi vida, me cuesta ponerla a andar... Saludos.
No es exactamente mi caso. Supongo que mi cara y mi expresión están alejadas de lo que puede "dar miedo". Pero sí que noto la incomodidad y desconfianza hacia mí de gente que no me conoce. Como ese "bicho raro" del que conviene no fiarse. Noto cómo, cuando esa persona me llega a conocer, desaparece esa prevención y me ve como lo inofensivo que soy, pero antes sí hay una distancia importante. Y no les culpo y lo entiendo. Me doy cuenta de que mi frialdad y mi falta de conexión es poco habitual y poco humana. Lo veo como uno de los muchos peajes que debemos pagar.
ResponderEliminarSí, de hecho compartimos esa sensación de bicho raro que proyectamos. Ese me parece un rasgo esquizoide marcado. Saludos.
EliminarQué quiere decir aquí ser "sombrío" y cómo eso causa miedo?
ResponderEliminarAlgo sombrío para mi es algo triste y melancólico. Qué tienen que ver la tristeza o melancolía con el miedo?
De ser esa la acepción correcta aquí, entonces el miedo que sufren los otros a nuestro lado es miedo a que les contagiemos con un gesto o tres palabras de tristeza?
Miedo a la tristeza es algo que creo que nos falta (cierto sufrimiento y melancolía es algo que Harry Haller y supongo que algunos de los "esquizoides" anhela!) , pero que supongo la mayoría de la gente posee. Y además no nuestros sentimientos no se dejan contagiar facilmente de los sentimientos de los que nos rodean.
Y por esas dos razones supongo que nos cuesta especialmente difícil comprender de forma empática por qué causamos tal miedo en otros.
Es la única explicación que le encuentro.
Alguién puede decirme si he entendido bien este post?
Intentaré explicar la relación.
EliminarEl sentido que le he dado a "ser sombrío" equivale a "ser oscuro". Y, en mi caso, esta oscuridad, este tinte gris, se traduce en gestos determinados: ceño fruncido, mirada hostil o recelosa, actitud seca ante cualquier intento de acercamiento de alguien que recién conozco, expresividad verbal monosilábica que, entiendo, puede aumentar las barreras, etc.
Ahora, dicho esto, igual yo nunca fui consciente de que daba miedo a otra gente. Luego de que me lo dijeron, y escuchando un poco sus razones, terminé por elaborar una relación entre aquello de ser sombrío/ oscuro (que puede ir de la mano con lo melancólico pero no necesariamente; en mi caso también soy melancólico) y el efecto de miedo que genera en otras personas. Ahora, digo miedo pero también puede ser temor (que es algo más leve), rechazo, animadversión o alguna otra reacción similar.
Espero haber aclarado un poco el panorama. Saludos.
Gracias por la aclaración.
EliminarHay gente muy-muy sensible que nos cala a la primera... Por suerte muchos de ellos son personas bondadosas. Hay gente, en cambio, que nos cala pero por instinto. Estos tienen más peligro.
ResponderEliminarEn mi caso no soy sombria en un sentido melancolico. Si notan que tengo un sentido del humor algo siniestro, morboso o negro, pero eso solo ocurre cuando un pensmiento fugaz pasa destrangis por los filtros que pongo a lo que digo de lo qu pienso.
ResponderEliminarQue doy miedo si lo he oido, o me lo han dicho. Incluso cuando me creen conocer y ven que soy inofensiva tengo esa forma de mirar.
Me dicen que les miro de una manera amenazante. Incluso con amigos de mis padres he oido esos comentarios: es que tu hija a veces me mira mal y me da miedo.
Yo no me doy cuenta, en el momento. No pienso nada malo cuando se supone que les miro mal.
Cuando les pregunto sobre esto, de que les miro mal y les doy miedo, he visto que son situaciones en las que esa persona ha hecho algo que yo no he entendido y le he mirado interrogandome yo misma. O veces en las que han dicho algo de mi o una broma que no he escuchado bien y me he girado para que la repitieran. Ahi si me doy cuenta de que la gente se keda en plan: tierra tragame.
Con los clientes tambien noto que a veces les miro en plan, y este que hace? Y se quedan parados , desviandome la mirada.
Pero de todas maneras es imposible que me expliquen que es eso de que les miro mal. Segun ellos es algo asi como que les miro fijamente, que les doy mal rollo, se sienten incomodos, es como que no saben que hacer o decir en ese momento.
Asi que, si, en mi caso no soy oscura languida, pero si les da miedo mi forma de mirarles, y mis bromas, a veces demasiado macabras, pero repito, a mi me parecen graciosas y no les veo la parte macabra.
Muy interesante lo de tus experiencias con los demás.
EliminarGracias por comentar, saludos.
No conocía el libro, me lo compraré y lo pondré junto a otro de mis favoritos: "Las ensoñaciones del paseante solitario" de Rousseau
ResponderEliminarYo necesito ayuda. No sé si soy esquizoide, pero sospecho que lo soy. Cumplo con casi todos los síntomas, salvo que, a pesar de nunca haber experimentado emociones fuertes (ni si quiera sé que es ser feliz) he experimentado (y experimento) depresión. En mi niñez y adolescencia creían que sólo era tímida e introvertida, pero yo sabía que lo que tenía, era más complejo que una timidez. Tampoco creo que sea coincidencia que en mi adolescencia me marcaran tanto libros como "El Guardián entre el Centeno" y "El extranjero" por verme reflejada en los personajes principales. Es decir, en serio soy como ellos, indiferente y melancólica. No me gusta estar con nadie, y cuando hago amigos, soy muy selectiva, es decir, la persona en cuestión tiene que tener cosas en común conmigo porque sino me aburre y pierdo el interés. Aunque de todos modos, eventualmente, cualquier persona con la que establezca algún tipo de relación, me termina aburriendo o cansando.
ResponderEliminarCabe destacar, que últimamente he sufrido despersonalización (que no necesariamente le pasa a los esquizoides) no le encuentro sentido a la vida y todo esto me parece tan absurdo... He pensado en el suicidio, desde hace mucho tiempo, sólo que, de un modo diferente. Es decir, yo no veo el suicidio como algo triste, he querido hacerlo porque la vida me aburre y todo esto me parece tan estúpido. Sólo me gustaría poder vivir en un bosque o en un lugar aislado de la civilización para que así, de llegar a hacerlo, no se arme tanto alboroto.
A principios de año, fui a un psiquiatra por mi depresión (cosa que es lo único que me hace dudar de si soy o no esquizoide ¿puede un esquizoide sufrir depresión?) y me diagnosticó con depresión en la primera consulta, me mandó unos antidepresivos y ya está. Dejé de ir, sólo fui una vez para que me recetara las pastillas.
Creía que eso era lo que tenía, depresión y una ligera ansiedad. Pero después de indagar e investigar sobre los trastornos de personalidad, me vi reflejada en el trastorno esquizoide. Que realmente no sé si tenga, aunque sospecho que hay muchas probabilidades de que sí sea así. Pero me pone a dudar, porque yo sí siento cosas. Aún no he perdido la empatía y aunque nunca he experimentado emociones fuertes (salvo quizá, la ira en el pasado) siento una profunda tristeza, sólo que me he habituado a ella con el tiempo considerándola incluso un rasgo de mi personalidad. También he padecido ansiedad en el pasado, como bien mencioné antes.
Hola, lo que me parece que necesita mayor atención es el problema de la depresión. Es un mal que causa muchos estragos, es como un virus que succiona por dentro y deja secos a quienes lo padecen. Sería importante que el psiquiatra que viste te hiciera un seguimiento y vea si los medicamentos están siendo efectivos. Por otro lado, la depresión no es un indicador de trastorno esquizoide. Aunque eso no significa que no haya esquizoides depresivos, pero no son condiciones indesligables. Para saber si hay en ti alguna tendencia esquizoide, tendrías al menos la mitad de estas características:
Eliminar- Frialdad emocional, desapego o afecto reducido.
- Capacidad limitada para expresar emociones positivas o negativas a otras personas.
- Preferencia consistente por actividades solitarias.
- Muy pocas, o ninguna, relaciones personales, y una falta de deseo por tenerlas.
- Indiferencia al elogio o a la crítica.
- Poco interés en tener experiencias sexuales con otra persona.
- Indiferencia a las normas sociales o convenciones.
- Preocupación por la fantasía e introspección.
Aquí hay una buena página: http://esquizoide.net/ . En todo caso todos somos diferentes y algo mas que una mera descripción del DSM IV
EliminarA veces me pregunto donde carajo están mis emociones. Donde estaba el dolor cuando debía sentirlo, en fin... no pasa muy a menudo pero cuando sucede desconozco totalmente mi naturaleza. Entiendo perfectamente a Hesse y su transfiguración a lobo.
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
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